Dulces que no pueden faltar en una posada

Pocas cosas distinguen tanto a los mexicanos como su hospitalidad. El esmero por atender a sus invitados, sean estos familiares, amigos e incluso desconocidos que por ser acompañantes de alguno de ellos se encuentran en su casa o reunión, es una regla no escrita de cortesía que facilita distinguir cuando nos encontramos en un evento organizado por un mexicano o mexicana.

En diciembre, las posadas son las reuniones por excelencia. Quienes se encargan de planearlas desean que los asistentes se relajen y disfruten el ambiente pre navideño que caracteriza a estas celebraciones. La comida, el ponche, la piñata, los postres y por supuesto, la tradicional bolsita de dulces, forman parte de los preparativos para asegurar, desde antes de la fecha de la fiesta, que todos y cada uno de los asistentes puedan disfrutarlos.

Luego de romper la piñata, con la que simbólicamente vencemos las tentaciones de los siete pecados capitales, expresados en los colores de cada uno de sus conos, y de reafirmar, con los ojos vendados mientras le pegamos, la fe en poder superar cada uno de sus efectos, vienen los dulces, los caramelos y las golosinas que brotan de la piñata como una recompensa, representando las riquezas celestiales que caen sobre quienes logran derrotar al mal.

Pero, no es suficiente con unos cuantos dulces para disfrutar esta deliciosa recompensa. Por eso, la repartición de bolsitas de dulces es común en toda fiesta, desde cumpleaños hasta posadas. A continuación, te decimos cuáles son los dulces que no pueden faltar en la bolsita de tu celebración decembrina:

• Una paleta: De sandía, de tamarindo o de caramelo, las paletas son un clásico de la infancia de todo buen mexicano que no puede faltar para complacer a los niños asistentes a tu posada, o para regalarle a los adultos un placentero viaje en el tiempo.
• Banderitas, cocadas y cacahuates: Si bien, las posadas son celebraciones de la temporada navideña, como buenas fiestas mexicanas no pueden faltar los dulces típicos, y qué mejor que una banderita de coco, una cocada, o cacahuates naturales para darle el toque tricolor a la bolsita de dulces.
• Chicles: Para quienes deben restringir su consumo de dulces o para tener a la mano una goma de mascar luego de una deliciosa comida, los chicles son también infaltables en este dulce paquete.
• Chocolates: En forma de moneda, de árbol de navidad, de Santa Claus o simplemente en barra, los chocolates son un placer irresistible del que gustan chicos y grandes, y que tampoco puede faltar en tu bolsita de dulces.
• Galletas: La mayoría de marcas de galletas las elaboran especiales para la temporada navideña, por lo que seguro encontrarás, al igual que en el caso de los chocolates, las adecuadas para darle a la bolsita de dulces un toque navideño y consentir a quienes prefieren la repostería antes que las golosinas.
• Dulces de tamarindo: La preferencia por los sabores agridulces, e incluso picantes, es popular entre los mexicanos, y los dulces derivados del tamarindo, acompañados de chamoy, de azúcar y de otros frutos como la manzana, el coco y la piña, son una excelente forma de darle variedad a tu bolsita de dulces, para asegurarte de que todos encuentren al menos un par de dulces de su preferencia.

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